viernes, 8 de febrero de 2013

Acampar.



Definitivamente extrañaba escribir.

Y hoy, con justa razón, después de un campamento, escribo con causa de experiencia. 


Antes de ser scout, me imaginaba los campamentos de otra manera. Pero tengo que reconocer (ustedes también lo saben) el escultismo llevó el 'camping' a otro nivel. Podría garantizar incluso que la palabra acampar la justifica el escultismo.

Además de los beneficios evidentes de acampar, hay experiencias y grandes recuerdos. No puedo explicarles qué tan especial es para mí acampar porque lo han experimentado, y sé, que les maravilla tanto como a mí, una fogata debajo de un cielo manchado de estrellas, el aire puro del campo, los sonidos y colores de la naturaleza, el color esmeralda de las hojas de los árboles al ser impactados por los rayos del sol.

Nada nos detiene. Ni el frío, ni el calor, ni la inmensidad de la montaña o las condiciones del clima en temporadas diferentes del año. No importa qué tan enferma esté, cuánta tarea haya dejado pendiente, cuántas veces le haya pedido a mis papás dejarme ir, qué olvidé en casa o cuántas cosas cancelé por asistir, acampar siempre será una de mis prioridades.

¿Por qué?

Porque es regresar a mis raíces, a mi pertenencia verdadera, a mis ganas de explorar y a la tranquilidad que me brinda la naturaleza. Acampar suele ser mi escape, mi refugio y mi alegría. Compartir momentos y experiencias con mis hermanos scouts me ha dejado mucho, y la mayoría de los recuerdos que tengo, han sido gracias a los campamentos.

En este punto de mi vida, que quizá no haya recorrido mucho, aseguro que los mejores momentos que he tenido, las grandes alegrías y los retos cumplidos, me los ha brindado el escultismo, y a su vez, la oportunidad me la ha dado el acampar. Tan sólo salir del área de confort, dormir en un sleeping bag sucio con todo y las incomodidades que conlleva, comer lo que probablemente contenga tierra o esté crudo y demás, es lo que me gusta hacer.

Me sorprende cómo existen personas que se niegan rotundamente a vivir una experiencia que quizá les traiga mayor felicidad que una cama cómoda o comida rápida. Me apeno y pregunto cómo es posible que rechacen tanta magnitud y belleza que sólo la naturaleza nos puede ofrecer, y la respuesta está más clara: los scouts estamos hechos de otra madera. Y con esto no quiero ofender a los civiles, o subestimarlos, no. Con esto digo, que ellos mismos se privan de cosas que les sorprenderían si no se negaran a vivirlas por cuenta propia.

Por eso cuando me molestan con eso de '¿y vendes galletitas?' probablemente mi cara sea de pocos amigos, pero en el pensamiento recorro cada reto y campamento que he tenido y me sorprende saber que, ellos probablemente no conocerán lo que yo, de seguir aferrados a las comodidades.

El escultismo es un juego al aire libre. No hay mejor frase para describir un campamento. Espero siempre para salir al campo a disfrutar de un cielo claro y un camino difícil, de llevar mi cuerpo a los extremos y celebrar al final de la noche con fogatas acompañadas de canciones que me hacen feliz, porque, cuando llegue a la etapa en la que el fin de pista se acerque, recordaré mi vida llena de aventuras y experiencias únicas que la naturaleza protagonizó, y sabré que en parte, mi vida valió muchísimo la pena. Prefiero recordar mi vida así, llegando a casa con una mochila llena de ropa sucia apestosa a fogata, que perdiéndome en fiestas y alcohol y
otros vínculos que no le favorecerían a lo que quiero para vivir.

Mi vida practicamente es eso, acampar


2 comentarios:

Lord Luinki dijo...

Hermoso! Los campamentos son lo máximo, y todos los Scouts lo saben.

Me parece penoso que haya gente que con solo escuchar que hay que dormir en un incómodo sleeping y comer comida con uno que otro poco de tierra ya piensen que ese es el peor castigo que exista.

Y no es casualidad que sean justamente ellos los que piensan que los scouts venden galletas. Buena entrada, Yari :D

Yars dijo...

¡Me gusta muchísimo que comentes mis entradas! Gracias por eso, se me pinta una sonrisa enorme. Es lo mismo que me preguntaba, pero bueno, eso es algo que sólo los scouts tenemos muy claro, la importancia y la emotividad de un campamento. ¡BUENA CAZA! :D